40.El último cigarrillo
Una vez que has elegido el momento, ya estás preparado para fumarte ese
último cigarrillo. Antes de hacerlo, asegúrate de que cumples con los dos puntos
esenciales:
1. ¿Estás seguro que vas a poder?
2. ¿Cuál es tu estado de ánimo? ¿Tienes una sensación de gran temor, o
piensas que vas a conseguir algo maravilloso?
Si tienes alguna duda, vuelve a leer el libro antes de lanzarte.
Cuando ya te sientas completamente dispuesto, fúmate el último cigarrillo.
Hazlo completamente sólo, y no lo fumes de una manera automática.
Concéntrate en cada calada, fíjate en el sabor y en el olor, en los humos
cancerígenos que entran en tus pulmones, en los venenos que te taponan las
venas y las arterias, en la nicotina que entra en tu cuerpo.
Cuando finalmente lo apagues, piensa en lo maravilloso que va a ser no
tener que hacerlo nunca más. La alegría que se siente al liberarse de esta
esclavitud es como si salieras de un mundo negro y tenebroso a otro lleno de luz
y calor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario